martes, 16 de octubre de 2018

# Biopic # Damien Chazelle

CRÍTICA DE FIRST MAN (EL PRIMER HOMBRE) (2018)

FIRST MAN: EL HOMBRE QUE FUE MÁS ALLÁ DE LA LUNA


La de First man no es una historia épica ni de patriotismo, es una historia de superación. No la del hombre común que se convierte en héroe, sino la del ser humano sobre lo inevitable: sobre la vida, sobre la muerte. Es una película del espacio y del infinito, pero no de aquel que está a millones de kilómetros, sino del interior: mucho más cercano pero aun más inabarcable. Es la vida de un hombre que tuvo que comprender lo último para ser el primero.

Ya no es la primera para Damien Chazelle, un hombre que prometía ser el primero desde el principio -manejando un rango difícil e intenso de emociones y superaciones imposibles, contando la felicidad desde la tristeza y viceversa, exprimiendo a sus actores -y al espectador-, coloreando y decolorando el mundo, poniendo la música en el centro, como si todo fuera música y nosotros viviéramos encerrados entre las líneas de un pentagrama- pero que después de la intensidad y ansiedad de Whiplash, y de la alegría melancólica de La La Land, parecía desviarse hacia un espacio diferente y mucho menos personal que podría poner en peligro esa potencial condición de primero. Parecía no haber espacio para el espacio en su particular mundo creativo. Entonces el espacio de expandió para que su condición de promesa siguiera intacta. En First man se concentran de nuevo la lucha con uno mismo, la pasión, las emociones incontrolables, la melancolía, la energía, la música y, sobre todo: la conexión profunda y viva con el espectador. Más allá de la inevitable cuestión comercial del nombre de Neil Armstrong y de unos créditos repletos de estrellas -con Spielberg como productor ejecutivo-, se esconde una obra íntima y sencilla dentro de la dificultad, que no olvida la vocación independiente de un joven director que un día soñó con ser el primero.


Como nosotros podemos soñar con serlo desde el otro lado de la pantalla. Atraídos por la fotografía granulada, mucho más certera que el recurso del metraje original. Movidos por el ritmo pausado y estresante al mismo tiempo, por la tensión y la relajación del constante peligro provocado por la más maravillosa sensación de lo sublime. Conmovidos por la belleza, pequeña y grandiosa a la vez, de la música de Justin Hurwitz, cuyo tema principal enlaza los dos conceptos alrededor de los que se construye y cierra el argumento, fluyendo subjetivamente en la estructura de toda la partitura -como lo hace, a menor escala, la angustiosa percusión-, como clave esencial para su comprensión. Y abrumados y sobrepasados por un misterio más allá de nosotros mismos: la luna, y el cine. Porque First man no es una película del espacio, sino una película que se ganará un espacio en la memoria cinematográfica de todos los soñadores que aun sueñan con ser más altos que la luna.

Valoración: 8.5 / 10


FIRST MAN (EL PRIMER HOMBRE) (2018)
Director: Damien Chazelle
Reparto: Ryan Gosling, Jason Clarke, Claire Foy, Kyle Chandler, Corey Stoll, Patrick Fugit, Lukas Haas, Pablo Schreiber, Brian d'Arcy James, Ciarán Hinds, Aurelien Gaya, Ethan Embry, Shea Whigham, Christopher Abbott, Cory Michael Smith, Brady Smith, Perla Middleton, J.D. Evermore
Libro: First Man: The Life of Neil A. Armstrong de James R. Hansen
Género: Drama, Biográfico, Espacio
Duración: 133 min.

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